Tras la muerte de J.A. Parrado el periódico le encargó unas líneas, una necrológica que le costaba escribir, pero que entregó:
A falta de otras virtudes se valora la puntualidad.
Eso, para Enric González, es periodismo de veteranos:
Contar en menos de una hora lo que no sabes ni quieres contar, y hacerlo mal, pero hacerlo a tiempo.
Lean sus Historias de Nueva York.